mi familia en la Venta del Salero en 1955
Ni en el bar de Mariano
ni en el de la Mariquita
podías tomarte en verano
una cerveza fresquita.
Un quinto y un cacahuete
por muy poquito dinero
en la tienda Ricardete
o en la Venta del Salero.
Ocurría en la carretera
allá por el año sesenta
Serón tenia su barrera
de entrada al pueblo en la Venta
Deciros que en la Estación
las cosas no estaban caras
aquel vino cabezón
casa Ricardo Cucharas
y en dirección a Canata
aún no estaba el Maginés
calentando la culata
de su Erre Ocho francés
En el Anchurón no había
ni bares ni aserradero
bajo su casa en la Umbría
Pedro Antonio el Carpintero.
Serón era diferente
y siendo así de pequeño
estaba lleno de gente,
todas sus casas con dueño
Ahora que tanto creció
por debajo de la Plaza
recuerdo cuando iba yo
de pajarillos de caza
3 comentarios:
Al ver la foto, me he decidido a comentar algo que ya tenía pensado. Se trata de la moda de aquellos años (y algunos antes) de lucir el típico bigote a lo Clark Gable. Sólo que no todos los hombres tenían arte para ello; recuerdo a Paquito el de Arturo, mi tío Pepe el de Juan Cruz, tu padre (es evidente)…
El mío lleva también muchos años colgado del labio de arriba.
Hijo, lo dices como si fuera un colgajo, como otros que hay en nuestra anatomía. Llévalo con dignidad, con altanería, como de familia.
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