Querido hierro y jamón:
Mi casa era una atalaya,
un alto en el callejón
del Roco y Anita Anaya
Hoy, los vecinos que tiene...
cuatro moscas y un mosquito
se trasladó el Tío Domene
y se nos murió Frasquito.
Ya no queda nadie más,
así lo quiso el Señor,
nos dijo adiós Nicolás
y emigró Juan Amador.
Y qué decir de mi padre...
fue a tomarse un refrigerio,
en compañía de mi madre,
a un nicho del cementerio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario